La Esfinge de Egipto en Giza podría ser la entrada a una misteriosa “ciudad secreta”, según las últimas investigaciones realizadas por historiadores.
Malcolm Hutton y Gerry Cannon creen que la Esfinge, que se encuentra en la meseta de Giza frente a las Grandes Pirámides, podría ser la puerta de entrada a un laberinto de túneles y pasadizos y a toda una “metrópolis subterránea” que se ha perdido para el mundo debido a a un encubrimiento por parte de las autoridades egipcias.
Los historiadores explican en su próximo libro, “Los secretos de la meseta de Giza y una segunda esfinge revelada”, que las noticias sobre esta ciudad perdida aparecieron por primera vez en los titulares debido a un artículo del Sunday Express de marzo de 1935 sobre las excavaciones que se estaban llevando a cabo en la meseta de Giza de una ciudad subterránea que en su momento se decía que databa de hace 4.000 años.
La pareja afirma además que los informes sobre esta ciudad fueron suprimidos.
Los historiadores creen que un agujero en la parte superior de la cabeza de la Esfinge podría ser una entrada a esta ciudad perdida, junto con otras aberturas en la estructura.
Sin embargo, afirman haber topado con un “muro de bloques de granito rosa” de las autoridades egipcias.
“Hay cosas ahí debajo, túneles. Mucha gente ha escrito sobre ello pero intentan taparlo todo”, dicen.
“Comenzaron a investigarlo pero luego se detuvieron. Entonces deben haber sabido que hay cosas allí, pero están preocupados”.
Hay recintos, hay fotografías que lo demuestran. Hay un agujero en la parte superior de la Esfinge, en su cabeza.
¿Por qué debería estar ahí? Desciende entre 8 y 10 pies y luego se adentra en pasillos.
Nunca han llevado cámaras allí, o las han hecho y no quieren mostrarlas”.
“Es obvio por el material de construcción y el color totalmente diferentes de la cabeza de la Esfinge, que creemos que no es roca, sino algún tipo de sustancia de adobe endurecido en comparación con su piedra caliza y su cuerpo erosionado.
“El ex Ministro de Estado de Antigüedades, Zahi Hawass, ya había dicho anteriormente que no había nada debajo de la Esfinge.”